¿Qué es?

Una de las experiencias más angustiosas y que nos llena de tristeza es la pérdida de un ser querido, física o sentimentalmente, incluso una mascota o un empleo o estatus.
Las pérdidas son parte de la vida. El periodo de duelo tiene diferentes etapas, y es normal sentir un gran dolor, aturdimiento e incluso culpa e ira, sin embargo estos sentimientos gradualmente se superan y es posible que sigas adelante, recordando a la persona o situaciones que ya no están con nosotros o a las que ya no pertenecemos.

Cuando el sentimiento de pérdida es debilitante, nos impide continuar con nuestra vida y actividades -es decir, cuando no podemos “resolver” nuestro duelo- o éste no mejora con el paso del tiempo, se denomina duelo complicado o “trastorno por duelo complejo”.

Cada persona tiene su forma de afrontar el duelo y cada duelo es diferente, las etapas y la duración pueden variar, sin embargo es importante aceptar la realidad de una pérdida, sentir el dolor que ésta causa, adaptarnos a una nueva realidad en la que esa persona o pérdida no está presente y darnos oportunidad de seguir con nuestra vida.

Si no logras superar estas etapas en más de un año después de la muerte de un ser querido, o las emociones dolorosas duran tanto y son tan intensas, que te resulta difícil recuperarse de la pérdida y continuar con tu vida; puedes estar padeciendo un duelo complicado.
En tal caso, es importante que busques a un especialista que te apoye con la superación de la pérdida para recuperar un sentido de paz y aceptación.

Cuándo debes consultar con un médico

Si el duelo parece imposible de desaparecer y tus pensamientos nublan tu mente de manera que no puedes continuar con tu vida, comunícate con un médico o un profesional de salud mental.

Si sientes una aflicción intensa y tienes problemas para desenvolverte que no mejoran, al menos, un año después de la pérdida es importante buscar ayuda.

Es parte de la humanidad sentir una tristeza profunda cuando perdemos algo que consideramos muy cercano o nuestro, sin embargo también es parte de nosotros mismos continuar disfrutando a otras personas, momentos y nuestra cotidianeidad sin culpas, teniendo nuestros recuerdos como parte de nuestro ser.

No estás solo, busca la ayuda que necesitas. En algunos momentos, las personas que padecen un duelo complicado pueden pensar en suicidarse.

Si te sientes de esa manera o conoces a alguien que está pasando por un duelo complicado, habla con alguien de confianza y busca ayuda profesional de inmediato.

Causas

Al igual que con muchos trastornos mentales, la causa del duelo complicado se desconoce.

El entorno, la personalidad, los rasgos hereditarios y la composición química del organismo, son factores que juegan un papel muy importante en la explicación de la manera en cómo reaccionamos ante el duelo.

Factores de riesgo

El duelo complicado ocurre, con mayor frecuencia, en las mujeres y en las personas mayores.

Los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer duelo complicado son:

● Una muerte inesperada o violenta, tal como una causada por un accidente automovilístico, o el asesinato o suicidio de un ser querido.

● La muerte de un niño.

● Una relación cercana o de dependencia con la persona fallecida.

● Aislamiento social, o falta de un sistema de apoyo o amistades.

● Capacidad de resiliencia de las personas.

● Antecedentes de depresión, ansiedad por separación o trastorno de estrés postraumático.

● Experiencias traumáticas durante la infancia, tales como maltrato o descuido.

● Otros factores importantes de la vida que causan estrés, como dificultades económicas importantes.

● Altas expectativas sociales.

Complicaciones

El duelo complicado puede afectarte física, mental y socialmente. Sin el tratamiento adecuado, las complicaciones pueden comprender:

● Depresión.

● Pensamientos y conductas suicidas.

● Ansiedad, (trastorno de estrés postraumático).

● Alteraciones significativas del sueño.

● Mayor riesgo de contraer enfermedades físicas como enfermedades cardíacas, cáncer o presión arterial alta.

● Dificultad para sobrellevar tareas cotidianas, mantener relaciones y realizar actividades laborales a largo plazo.

● Consumo de alcohol y nicotina o abuso de sustancias.

Prevención

No se conoce una manera para prevenir los duelos complicados.

Una recomendación es recurrir al asesoramiento psicológico al vivir la pérdida de un ser querido, especialmente a las personas que tienen un mayor riesgo de padecer duelo complicado.

Otras recomendaciones al vivir una pérdida significativa son:

- Hablar: no guardes tu dolor, permítete llorar y liberar ese dolor y tristeza. Por mucho que sientas que es imposible, confía en que, en la mayoría de los casos, el dolor empezará a irse si te permites sentirlo. Habla con familiares y amigos sobre tus sentimientos y escucharlos.

- Apoyo: Tanto con miembros de tu familia, amigos y grupos de apoyo social, todos son una red de confianza que pueden ayudarte a superar el dolor.

- Terapia de duelo: Te permite explorar las emociones relacionadas con el duelo y aprender capacidades para hacer frente a desafíos o situaciones de manera saludable.

No hay una manera fácil de superar un duelo, sin embargo si dura más de un año, es importante que platiques con un profesional, para poder recuperar tu vida y permitirte disfrutar de ella, aprendiendo paso a paso a recordar con amor a las personas que ya no están, las pérdidas sufridas, los amigos o mascotas que yo tampoco están y aún los trabajos, puestos y expectativas perdidas.